¿Cuándo es la mejor época para visitar Roma? Esta pregunta me la llegué a hacer en muchas ocasiones cuando me rondaba la cabeza visitar la Ciudad Eterna. Siempre he escuchado que Roma en verano la ciudad es muy caótica, hace demasiado calor y que hay demasiados turistas.
Quizás de forma inconsciente terminé escogiendo diciembre, pocos días antes de Navidad pero la única diferencia es que a pesar del fuerte frío, el caos y los turistas permanecían. Este era el preludio de unos días por Roma en Navidad.
Roma sin su perenne (y controlado) caos no sería la encantadora ciudad que es, y al mismo tiempo ¿qué ciudad no se convierte en un caos pocos días antes de Navidad? Este conjunto de factores me permitió descubrir un lugar que sobretodo de noche se teñía de un hechizo especial. En los días mas cortos del año las luces se encendían antes de lo habitual, permitiéndome usar una buena cantidad de horas nocturnas para capturar la ciudad.
El Coliseo
Mis recorridos de noche por Roma no se salieron de lo habitual, mas bien son lugares muy conocidos por todos, como por ejemplo el Coliseo Romano, monumento que por su importancia bien podría ser lo mismo a Roma que la Torre Eiffel a París, y como la Torre, el Coliseo no defrauda.
Completamente inundado por una iluminación exquisita, de noche incluso se torna mas misterioso y enigmático, sobretodo porque a excepción de los coches alrededor, estaba prácticamente desierto.
Piazza Venezia
Mi trayecto continuó a través del Foro Romano hasta llegar a Piazza Venezia, con su árbol de Navidad y pesebre, curiosamente también desierta. La sobria iluminación acierta en restarle ese elemento colosal, muy distinto de lo que se puede apreciar de día, con el bullicio de los coches.
El Panteón
Continué caminando por callejuelas perdidas hasta encontrarme por casualidad el Panteón y sencillamente no dar crédito. Uno de los testigos mejor conservados de la Roma Clásica, edificio de proporciones perfectas que ha servido de inspiración y modelo para arquitectos de todas las épocas y cuya influencia ha trascendido continentes y siglos de historia. Pues allí se encontraba, en casi perfecta soledad a excepción de un par de turistas un poco perdidos, como yo.
Piazza Navona
Esta plaza que en la antigüedad fue sede del circo del Emperador Domiciano, tenía una capacidad para 30.000 personas y conserva el trazado elíptico original. Está decorada por tres fuentes impresionantes. Al centro, la Fontana de los Cuatro Ríos, y a sus extremos la Fontana de Nettuno y la Fontana del Moro. Sin duda, de las fuentes de Roma, de las más preciosas.
Afortunadamente, aquí ya se veía un mayor movimiento de gente, gracias en parte al mercadillo de Navidad instalado alrededor de la Piazza, con tiovivo incluido, castañas asadas y juegos de feria. Un ambiente extraordinario.
Vía del Corso
El ambiente se continuó animando mientras me acercaba a Via del Corso, y una vez allí las calles ya rebosaban de gente. Y como no estarlo, si es una de las calles principales del centro de Roma e importante eje comercial, y para mas nos encontramos en plenas fiestas consumistas, o lo que es lo mismo, navideñas.
Tal era el nivel de concurrencia, que el paso de coches estaba cerrado y los peatones inundaban la calzada entre música, árboles de Navidad, bailes improvisados de tango, luces colgantes con los colores de Italia…el bullicio por fin se hacía presente en las calles de Roma.
Que mejor forma de terminar este recorrido buscando la Fontana di Trevi, donde la gente además de tomarse la foto y lanzar las tres monedas en la fuente mas famosa de Roma, se atreven a desafiar las bajas temperaturas con un gelatto, tradición que se mantiene aun en invierno.
Finalmente, para responder a mi pregunta inicial, cualquier época del año es buena para conocer Roma, pero la Navidad le otorga un encanto único y no hay que perdérselo.
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Pues yo conocí Roma en un mes de febrero de hace casi 16 años. No escogí yo la fecha fue el viaje de estudios de BUP (el antiguo bachillerato) el instituto y la agencia de viajes decidieron la fecha porque era temporada baja. Frío no recuerdo demasiado, incluso me comí unos cuantos helados que fue lo mejor del viaje junto con el panteón y las catatumbas. Esa plaza con forma de maquina de escribir con la tumba del soldado desconocido se llama Venezia? Estaba cerca de nuestro punto de encuentro, la columna de Trajano del tiempo libre que nos dejaban por la tarde.
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Yo creo que conocer cualquier ciudad en esas fechas tiene el encanto de la decoración, de las luces, de que la gente tiene un ánimo especial, algunos porque son creyentes y otros porque se acaba el año y tienen esperanzas de que el nuevo sea mejor… Roma la visité ya no recuerdo en que mes pero igual me cautivó vivir sus calles, sentir su historia… Saludos!
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Esta entrada es claramente para ponerme los dientes largos jaja
Allí estaré para pasar el fin de año y desde luego tal como me lo pintas en esta entrada, la cosa promete y mucho 😀
Saludotes!
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Gracias!! Espero que lo pases genial y que luego me cuentes que tal la experiencia de la Nochevieja en Roma. Un abrazo y saludos!! 🙂
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Hermoso tu post! Estoy pensando en pasar las Navidades en Roma 🙂
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Gracias por el comentario. Sí decides pasar navidades en Roma seguro no te arrepentiras!
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Roma es bella en estas fechas y en cualquier otra. En estas especialmente por la decoración, pero, en otras épocas del año tiene un encanto especial.
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Voy a pasar el puente de la inmaculada en Roma y despues de leerte el post me has dejado con muchas ganas de ir y no aguanto la espera!!!
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Hola Meritxell, ¡que envidia! Espero que lo pases muy bien y disfrutes de Roma en Navidad. Saludos!
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pasare unos días en Roma en navidades gracias por la informacion
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