El patrimonio de Sevilla es muy superior comparado al de otras ciudades más grandes, pero si hablamos de su legado cultural e histórico, entramos en un territorio que es imposible de medir.

Recorrer Sevilla es emprender un viaje por distintas civilizaciones, períodos artísticos y una historia que la han convertido en una de las joyas más grandes de España y Europa, pero hacerlo en Navidad es aún más bonito.

A continuación, te contamos qué ver en Sevilla por Navidad, haciendo un repaso por algunos de sus monumentos más imprescindibles y el ambiente navideño que se respira en la ciudad.

Metropol Parasol

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Ha sido una de las más recientes adiciones al centro histórico de Sevilla y desde luego no deja a nadie indiferente. También llamado las Setas de la Encarnación, desde su cubierta a 26 metros de altura permite ver hermosas vistas de Sevilla y de la histórica plaza del mismo nombre.

Durante la Navidad, Metropol Parasol será el protagonista de un novedoso espectáculo de luz y show multimedia, que forma parte de la programación de #AlumbraSevilla.

Este ambicioso programa llevará proyecciones audiovisuales 4D con secuencias de óperas famosas y espectáculos teatrales a este y otros monumentos de la ciudad hispalense como la Alameda de Hércules o El Palacio de San Telmo, bajo el lema “Sevilla, ciudad de ópera”. Estos tres puntos, serán los centros neurálgicos de la programación navideña.

Catedral de Sevilla

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La Giralda y el alumbrado navideño

A pesar de haber sido utilizada por los sevillanos por más de 150 años, la mezquita construida durante el período almohade se reemplazó por un edificio de formas más cristianas.

Es así como en este mismo terreno comienza la construcción de la Catedral de Sevilla en el siglo XV, con la idea de hacerla tan impresionante que pareciera creada por la mano de Dios.

Lo cierto es que aparte de ser la catedral gótica cristiana más grande del mundo, es Patrimonio de la Humanidad y Bien de Valor Universal Excepcional. Allí descansan los restos de varios reyes de Castilla y los del mismísimo Cristóbal Colón.

Giralda

Si hay un monumento capaz de inspirar un viaje a Sevilla por sí solo, ese es La Giralda. Otra de las visitas imprescindibles en Sevilla, la Giralda es el campanario de la catedral y uno de los símbolos de la ciudad, que durante siglos fue la torre más alta de España.

Los dos tercios inferiores de la torre corresponden al alminar de la antigua mezquita, mientras que la parte superior fue una adición en período cristiano, para acoger el campanario.

Es imperativo subir sus 94 metros de altura para disfrutar de las vistas más espectaculares de Sevilla.

Torre del Oro

Rivalizando con la Giralda por la atención de todas las miradas está la Torre del Oro. Construida en 1220 por el gobernador almohade como parte del sistema defensivo de la ciudad, recibe su nombre por el fuerte brillo dorado que desprende durante el atardecer junto al Guadalquivir. En la actualidad acoge el Museo Naval de Sevilla.

Plaza San Francisco Sevilla
Plaza San Francisco

Parque Maria Luisa

Dentro del conjunto impresionante de monumentos a orillas del Guadalquivir se halla el Parque de Maria Luisa, el más importante de Sevilla. Este espacio natural, que originalmente formaba parte de los jardines privados de la infanta Maria Luisa de Borbón, fue donado a la ciudad en 1893 y transformado dramáticamente con motivo de la Exposición Iberoamericana de 1929 que tuvo lugar en Sevilla.

El resultado es una hermosa sucesión de pasajes arbolados, glorietas y rotondas que es lugar de esparcimiento para los sevillanos.

Archivo de Indias

Sevilla, única ciudad española de interior que goza de un puerto marítimo, fue elegida por la Corona como punto de partida y llegada para todo lo relativo con las colonias.

La Casa Lonja de Mercaderes de Sevilla, se designó como Archivo General de Indias en 1785 con la finalidad de organizar en un solo sitio, toda la documentación que antes estaba dispersa en varios archivos. En la actualidad es Patrimonio de la Humanidad y alberga más de 80 millones de documentos de la administración de las antiguas colonias españolas.

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Alumbrao en el Ayuntamiento de Sevilla

Real Alcázar de Sevilla

Uno de los mayores tesoros arquitectónicos de esta ciudad y el mundo, es el Real Alcázar. Este colosal palacio históricamente ha sido utilizado como alojamiento, tanto para los gobernadores árabes como para los miembros de la Casa Real Española. La impresionante fortificación, que presume de elementos mudéjares, góticos, renacentistas y barrocos, es una sucesión de jardines, patios, palacios, salas y galerías con un mérito artístico y riqueza arquitectónica que no tiene comparación. Una de las muchas razones para acercarse a esta ciudad cuyo encanto no tiene límites.




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