Muchas de las construcciones más emblemáticas y memorables de la humanidad tienen una motivación religiosa. Desde los antiguos templos egipcios a las pirámides mayas, pasando por las catedrales europeas a las mezquitas del mundo islámico, han quedado como evidencia de los grandes avances técnicos y constructivos que en muchos casos sentaron las bases para un nuevo orden arquitectónico.
Rara vez se suele asociar la arquitectura contemporánea a la religiosa, y teniendo en cuenta lo rígida que podría ser una doctrina, es peculiar la libertad que se observa en muchos ejemplos de templos contemporáneos. Es el caso del Centro ecuménico Abraham.
Un templo muy peculiar
Ubicado donde termina la Villa Olímpica y comienza el barrio del Poblenou, la actual parroquia de la Villa Olímpica fue construida por el arzobispado de Barcelona con motivo de los Juegos Olímpicos de 1992, como centro de servicios religiosos para los delegados y atletas de tal evento, donde se daba cabida a católicos, protestantes, budistas, islámicos y judíos por igual. Si visualmente este edificio ya me parecía muy interesante, ahora que conozco su trasfondo me gusta aún más. Un templo para todos los credos. Suena utópico ¿no?
La construcción del centro se encargó a los arquitectos Josep Benedito y Agustí Mateos, quienes llevaron a cabo la difícil tarea de crear un espacio común para distintas religiones. La estructura formal tiene una clara inspiración marina, que se evidencia en la forma de pez con su cola, así como el hito que asemeja un mástil, pero visto de otro ángulo también podría parecer un ojo. ¿El ojo de Dios quizás?
Inspiración para el Centro Abraham
El verdadero reto de crear un templo contemporáneo, sin caer en referencias del pasado, es evocar la espiritualidad. Benedito y Mateos lo consiguieron huyendo de la concepción tradicional de alcanzar una altura interior considerable, en un intento de representar los cielos (quizás el mástil sea el único elemento que invita a mirar hacia arriba, una posible interpretación de un campanario o minarete).
Por otro lado, la ausencia de ángulos rectos y el encuentro de dos ángulos desiguales que conforman una elipse, donde se encuentra la sacristía y donde según cómo incide la luz de crean unos efectos interesantes, una alusión quizás al universo en si.
Sea cual sea la interpretación, para mi se trata de uno de los templos más emblemáticos de Barcelona, donde se demuestra que en ocasiones la solución más sencilla puede ser la más elegante.
Me ha parecido muy interesante el artículo! Ni siquiera conocía este templo…
Te acabo de descubrir y me gusta mucho tu blog…ya soy fan!
Yo me dedico a dibujar Barcelona, a veces lugares emblemáticos, a veces rincones insólitos. Te animo a echar un vistazo y a seguir mi trabajo, si también te resulta interesante: http://www.barcelonink.com.
Gracias!
Hola Xavi, muchas gracias por este comentario. Como fan del dibujo, debo reconocer que acabas de ganar otro fan, haces muy buen trabajo y tu blog me parece muy interesante! Ya me gustaría poder dibujar así. Ten por seguro que lo seguiré descubriendo. ¡Saludos y gracias!
Excelente artículo. Tengo una pregunta. Tuve la oportunidad de conocer este edificio en 1993 pero no pude entrar porque en ese momento estaba cerrado. Me dí a la tarea de buscar imágenes interiores en internet y me llama la atención que nunca publican imágenes interiores. ¿Tienes idea si existe alguna razón en específico o simplemente sea casualidad? Saludos.
Hola Javier, muchas gracias por tu comentario. Curiosamente, yo tampoco pude entrar ya que al momento de mi visita también estaba cerrado, así que me es difícil contestar a tu pregunta. Existe muy poca información sobre este centro en internet, pero ten seguro que la próxima vez que esté cerca de la zona, me acercaré de nuevo a ver si es posible entrar. ¡Gracias!